Nuestro compromiso con la creación de empleo, ha convertido al níspero en la base de la economía de la zona creando nuestra propia filosofía de vida.
El cultivo del níspero es el eje en torno al cual gira la vida y la economía de Callosa d’en Sarrià.
Es por ello que la población joven dispone de un modo de vida local, evitando así la temida despoblación de las zonas rurales.
Por eso decimos que el cultivo del níspero en Callosa d’en Sarrià es un factor de fijación de la población.
El hecho de que los nísperos se exporten por muchos países, hace que la zona de Callosa d’en Sarrià sea proyectada por el mundo, dando así visibilidad a una zona rural y abriendo las puertas para otras alternativas de negocio como el turismo. Por eso decimos que el cultivo del níspero pone a Callosa d’en Sarrià en el mapa mundial.
La perfecta aclimatación del cultivo a la zona hace que no tengamos que usar invernaderos de plástico para su cultivo. Tan solo mallas de protección contra el viento. La proximidad de los manantiales de agua hace que no tengamos que traer agua de grandes distancias, por lo que el coste energético del riego es muy bajo. La proximidad de los almacenes de clasificación y envasado hace que los costes energéticos de producción sean muy reducidos.
Por eso decimos que el cultivo del níspero en Callosa d’en Sarrià es un cultivo sostenible.
En el cultivo del níspero no se aplican insecticidas para no dañar a las abejas que tanto necesitamos para su polinización. Una vez recolectado, al níspero, no se le aplica ningún tratamiento postcosecha, ni conservantes, ni antifúngicos, ni antibióticos, ni nada. Por eso decimos que es un cultivo respetuoso con el medio ambiente.